Más allá de que seguramente esos seis campesinos sean inocentes de lo que se los acusa, me preocupa la retórica de Bayer. En lugar de argumentar diciendo dónde estuvieron y por qué no entraría en ninguna lógica que esas personas intentaran atentar contra el presidente de su país, al igual que con el caso Soriano, tira biografías sobre la mesa. La vida está jugada de antemano si creemos que el desenvolvimiento de los acontecimientos futuros dependen de los pasados de una manera lineal y coherente. Me preocupa. La ideología determina la realidad. Y tiene que ser así. Un plano oblitera casi totalmente al otro en el discurso de Bayer. "Como Roca tal cosa, ahora, que sigue habiendo burguesía, lo mismo..."
Exactamente, Diego. Para ser sincero no entedí mucho más que la primera fase, pero el problema de Bayer es la retórica. Pareciera que encuentra excusas en la realidad para poner en marcha la maquinita de un tono y unas imágenes que son aquellas que esperan sus lectores, sin importar la realidad referida. Quiere ser literario, pero a fuerza de repetición es todo lo contrario de la literatura; y del periodismo. No es extraño que defienda a Soriano; porque él hace sin reconocerlo lo que Soriano hacía buscándolo, y en eso es respetable: repetía incesantemente la misma fórmula.
En el caso de Bayer, yo creo que lo hace sin mala intención. Debe ser buen tipo. Pero el tema es que sí, ha encontrado una fórmula, y no deja de repetirla. Y a algunos, sin comerla ni beberla y madrugando para laburar, ya nos hincha las bolas que nos corran todo el tiempo por izquierda. Si a eso le sumamos que en su discurso público no duda. Siempre ellos son los buenos y los otros los malos. "Nosotros porque nosotros y Uds son los herederos de Roca". Tirarle a la Argentina actual la campaña del desierto de Roca, me parece jodido. Además, el de Bayer y tantos otros que apoyan su discurso ya es un lugar instituido. "El sistema" ya sabe lo que provoca esa retórica y ya tomó sus recaudos cuan terraplén contra las subidas del río. Es más, de alguna forma, ya son parte de la foto argentina del presente.
Ahora te entendí más. Yo también creía que era muy buen tipo, aunque tenía el gran defecto varonil de no escuchar, hasta que comparó (y esta comparación, precisamente en él, no puede ser inocente) a Beatriz Sarlo con un coronel fusilador, sólo porque decía algo que no le gustaba, y, convencido de que quien él no conoce es sospechoso de complicidad con la dictadura, encaró a María Moreno con aire de comisario de KGB: "¿y usted, señora, qué hizo durante la dictadura...?" Podés decir miles de cosas de cada una, hasta descalificaciones como petulante en un caso e incurable snob en otra, pero no pasarlas, inmediatamente, al fascismo... También dudo -todos los escritores conocen anécdotas al respecto- que Soriano fuera tan buen tipo. Pero más allá de esto. Yo creo que lo más denostable que provoca Bayer con su retórica machacona es peor que la polémica o el repudio: es sueño. Como sea, no me parece que haya que dejarle pasar las barrabasadas que se mandó en esta polémica, sobre todo porque pone esa cara de abuelito bueno que te convence a alguien tan notoriamente desconfiado como vos, según ya veo. También se parecería en eso a Soriano: pertenece a la raza de los gorditos seductores.
Diego, me ponía a trabajar cuando se me ocurrió esta posdata que quizá te interese. Lo que todos los escritores sabemos es que Soriano mandó echar a Guillermo Saavedra de un medio porque le había hecho una crítica adversa. Lo que Bayer hace con otra periodista, María Moreno, es tratar de mancharla de un modo que, de haber sido ésta menos conocida o de tener antecedentes menos reconocibles, le habría impedido seguir trabajando, ganándose la vida como una burra, como todos sabemos que lo hace -y como vos decís de vos mismo. Es decir: es un mismo mecanismo botón y policíaco, sólo que Soriano, nuevamente, era más sincero y no invocó otra cosa que su vanidad, y Bayer cree que puede echar porque su trayectoria le dio ese derecho. La verdadera discusión que corre bajo esta polémica es ¿quién tiene derecho a expulsar a quièn?. Cuando, en realidad, debería ser, por qué expulsar, y hasta que medida expulsar al otro no empobrece -como esta demostrando todo esto- en todos los sentidos, al que expulsa. No se si se entiende, pero ya es hora de laburar.
Ultima posdata: si el medio de donde mandó echar a Guillermo Saavedra no es el mismísimo Página12, pega en el palo. Lo cual vuelve aun más turbio el "entrañable homenaje".
En cuanto a lo de homologar presente y pasado, Diego, ahí disentimos. En cierta forma, lo que hace Bayer es deslegitimar los relatos en que hoy, todavía, los herederos de la oligarquía se justifican a sí mismos. Cuando tú eras un niño aun, la dictadura celebraba el centenario la conquista del desierto como si fuera su propio triunfo. Lo que hace Bayer es demasiado mecánico, es verdad; pero no está demás repasar, por ejemplo, apellidos argentinos que hoy administra Merril Lynch, uno de los principales acreedores en la deuda externa, y cotejar si no vino de la Campaña su prosperidad. También ellos dicen "fue mi abuelo, ¿por qué tendría que hacerme yo cargo de eso?" lo que, traducido, también quiere decir, por qué debería yo laburar como todo el mundo? En fin, cosas.
Pablo, creo que el anónimo tiene razón. La versión que escuché, según creo, de gente cercana al damnifnicado, es que sucedió en Página, donde Soriano tenía más banca, y extorsionó amenazando retirar sus contratapas o colaboraciones. Concuerdo con lo que dicen de Bayer, que fue corriéndose -creo que por cansancio, sí, más que por mala leche- hacia un modelo de escritor fabricado para decir lo que una franja de público espera, como Galeano o Benedetti. L
Más allá de que seguramente esos seis campesinos sean inocentes de lo que se los acusa, me preocupa la retórica de Bayer. En lugar de argumentar diciendo dónde estuvieron y por qué no entraría en ninguna lógica que esas personas intentaran atentar contra el presidente de su país, al igual que con el caso Soriano, tira biografías sobre la mesa. La vida está jugada de antemano si creemos que el desenvolvimiento de los acontecimientos futuros dependen de los pasados de una manera lineal y coherente. Me preocupa. La ideología determina la realidad. Y tiene que ser así. Un plano oblitera casi totalmente al otro en el discurso de Bayer. "Como Roca tal cosa, ahora, que sigue habiendo burguesía, lo mismo..."
ResponderBorrarSaludos
Exactamente, Diego. Para ser sincero no entedí mucho más que la primera fase, pero el problema de Bayer es la retórica. Pareciera que encuentra excusas en la realidad para poner en marcha la maquinita de un tono y unas imágenes que son aquellas que esperan sus lectores, sin importar la realidad referida. Quiere ser literario, pero a fuerza de repetición es todo lo contrario de la literatura; y del periodismo. No es extraño que defienda a Soriano; porque él hace sin reconocerlo lo que Soriano hacía buscándolo, y en eso es respetable: repetía incesantemente la misma fórmula.
ResponderBorrarEn el caso de Bayer, yo creo que lo hace sin mala intención. Debe ser buen tipo. Pero el tema es que sí, ha encontrado una fórmula, y no deja de repetirla. Y a algunos, sin comerla ni beberla y madrugando para laburar, ya nos hincha las bolas que nos corran todo el tiempo por izquierda. Si a eso le sumamos que en su discurso público no duda. Siempre ellos son los buenos y los otros los malos. "Nosotros porque nosotros y Uds son los herederos de Roca". Tirarle a la Argentina actual la campaña del desierto de Roca, me parece jodido.
ResponderBorrarAdemás, el de Bayer y tantos otros que apoyan su discurso ya es un lugar instituido. "El sistema" ya sabe lo que provoca esa retórica y ya tomó sus recaudos cuan terraplén contra las subidas del río. Es más, de alguna forma, ya son parte de la foto argentina del presente.
Ahora te entendí más. Yo también creía que era muy buen tipo, aunque tenía el gran defecto varonil de no escuchar, hasta que comparó (y esta comparación, precisamente en él, no puede ser inocente) a Beatriz Sarlo con un coronel fusilador, sólo porque decía algo que no le gustaba, y, convencido de que quien él no conoce es sospechoso de complicidad con la dictadura, encaró a María Moreno con aire de comisario de KGB: "¿y usted, señora, qué hizo durante la dictadura...?" Podés decir miles de cosas de cada una, hasta descalificaciones como petulante en un caso e incurable snob en otra, pero no pasarlas, inmediatamente, al fascismo... También dudo -todos los escritores conocen anécdotas al respecto- que Soriano fuera tan buen tipo. Pero más allá de esto. Yo creo que lo más denostable que provoca Bayer con su retórica machacona es peor que la polémica o el repudio: es sueño. Como sea, no me parece que haya que dejarle pasar las barrabasadas que se mandó en esta polémica, sobre todo porque pone esa cara de abuelito bueno que te convence a alguien tan notoriamente desconfiado como vos, según ya veo. También se parecería en eso a Soriano: pertenece a la raza de los gorditos seductores.
ResponderBorrarDiego, me ponía a trabajar cuando se me ocurrió esta posdata que quizá te interese. Lo que todos los escritores sabemos es que Soriano mandó echar a Guillermo Saavedra de un medio porque le había hecho una crítica adversa. Lo que Bayer hace con otra periodista, María Moreno, es tratar de mancharla de un modo que, de haber sido ésta menos conocida o de tener antecedentes menos reconocibles, le habría impedido seguir trabajando, ganándose la vida como una burra, como todos sabemos que lo hace -y como vos decís de vos mismo. Es decir: es un mismo mecanismo botón y policíaco, sólo que Soriano, nuevamente, era más sincero y no invocó otra cosa que su vanidad, y Bayer cree que puede echar porque su trayectoria le dio ese derecho. La verdadera discusión que corre bajo esta polémica es ¿quién tiene derecho a expulsar a quièn?. Cuando, en realidad, debería ser, por qué expulsar, y hasta que medida expulsar al otro no empobrece -como esta demostrando todo esto- en todos los sentidos, al que expulsa. No se si se entiende, pero ya es hora de laburar.
ResponderBorrarUltima posdata: si el medio de donde mandó echar a Guillermo Saavedra no es el mismísimo Página12, pega en el palo. Lo cual vuelve aun más turbio el "entrañable homenaje".
ResponderBorrarNo, fue de La Razón.
ResponderBorrarWell anyway...
ResponderBorrarEn cuanto a lo de homologar presente y pasado, Diego, ahí disentimos. En cierta forma, lo que hace Bayer es deslegitimar los relatos en que hoy, todavía, los herederos de la oligarquía se justifican a sí mismos. Cuando tú eras un niño aun, la dictadura celebraba el centenario la conquista del desierto como si fuera su propio triunfo. Lo que hace Bayer es demasiado mecánico, es verdad; pero no está demás repasar, por ejemplo, apellidos argentinos que hoy administra Merril Lynch, uno de los principales acreedores en la deuda externa, y cotejar si no vino de la Campaña su prosperidad. También ellos dicen "fue mi abuelo, ¿por qué tendría que hacerme yo cargo de eso?" lo que, traducido, también quiere decir, por qué debería yo laburar como todo el mundo? En fin, cosas.
ResponderBorrarAnónimo,
ResponderBorrarSi firmaras debajo de tus dichos podría sentirme tentado a discutir con vos. En las condiciones actuales, siento que falta algo.
Saludos
no yo no pretendo que discutas, me ayudaste a pensar, nada más. gracias. por lo demàs, tampoco sé si tu nombre es diego. saludos.
ResponderBorrarPablo, creo que el anónimo tiene razón. La versión que escuché, según creo, de gente cercana al damnifnicado, es que sucedió en Página, donde Soriano tenía más banca, y extorsionó amenazando retirar sus contratapas o colaboraciones. Concuerdo con lo que dicen de Bayer, que fue corriéndose -creo que por cansancio, sí, más que por mala leche- hacia un modelo de escritor fabricado para decir lo que una franja de público espera, como Galeano o Benedetti. L
ResponderBorrarCierto, lo hizo rajar de Página. En La Razón, Saavedra había publicado la crítica adversa.
ResponderBorrarLo hizo rajar nomás? Yo creía que había intentado, pero no conseguido. Qué linda es mi familia! L
ResponderBorrardiego, cuando dijiste que no te tentaba discutir, ¡ya habías discutido! igual, gracias.
ResponderBorrarpablo y L: pueden asegurar ese dato? podría publicarlo en una revista online?
Pero no lo sabías, ya? Sí, yo creo que podés, es incluso necesario. Sudestada, o me equivoco? L
ResponderBorrarpor ahí anda, L. gracias y no mencionaré la fuente.
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