30.4.04

Varios, Escrito sobre Borges, Josefina Delgado (comp.), Buenos Aires, Planeta, 1999.

14 reescrituras de cuentos de Borges, por escritores argentinos.
Hay un par de “El Aleph” y otro par de “La intrusa” (estos últimos, feministas, como era previsible).
En realidad, lo que más se destaca no es exactamente un cuento, aunque su hipotexto tampoco lo es...: “Pierre Menard, autor del Quijote”, revisitado por José Sazbón en un alarde de erudición y sagacidad. Sazbón imagina un Menard de izquierda, influido por los formalistas y por una lectura hegeliana-leninista de Marx. Sencillamente brillante. Por supuesto, no se priva de transcribir (y analizar) algunos fragmentos del Quijote “de” Menard.


Gabriel Zaid, Los demasiados libros, Buenos Aires, Carlos Lohlé (Cuadernos Latinoamericanos), 1972, 112 pp.

(Una nueva edición de este libro ganó el premio de ensayo Anagrama hace pocos años, según creo. Realmente se lo merece.)
La primera parte hace breves reflexiones sobre la actualidad del libro. Todas sus “teorías” son innovadoras, y algunas, proféticas.
Por ejemplo, el tipo de librerías que debería haber: especializadas (“monográficas”) y “enciclopédicas”, con más de 100.000 títulos, quizás ubicadas en centros comerciales (!!!!!!).
Al principio hay un elogio del libro, pero es bastante paradójico, más que nada para oponerse al lugar común de que los medios audiovisuales estaban a punto de desplazarlo. Y, pese a que todavía no existía la videograbadora casera (cuya existencia anticipa), lo que dice sigue siendo vigente. Aun con Internet, que no se imaginaba siquiera.
En realidad, todo el libro está dirigido a demoler lugares comunes sobre el libro (su influencia, su precio, etc.), y el tono es de una ironía verdaderamente fina, con una prosa clásica de gran elegancia (como las que ya no hay): “Tu libro es una brizna de papel que se arremolina en las calles, que contamina las ciudades, que sopla sobre el planeta. Es celulosa, y en celulosa se convertirá” (p. 42).
Noticia rara: se calcula que hay aproximadamente 20 millones de incunables, es decir, libros impresos hasta 1500 (el dato es de Robert Escarpit; yo hubiera pensado en miles, como máximo).
Entre las ventajas más fuertes del libro, propone, sin ironía, y con toda justicia, que es el medio más barato. Un libro puede ser financiado por 1.000, 2.000, 3.000 lectores.
Una de las grandes desmitificaciones tiene que ver con el precio del libro (tema un poco abstruso al que está dedicada la segunda parte del libro). Dice que no siempre bajar el precio hace los libros más accesibles. (Y que los grandes “culpables” de que los libros se vendan poco son los universitarios, que deberían leer más pero no han aprendido suficientemente a hacerlo.)
La teoría central de la segunda parte es que “hay que desligar tiraje y precio”. No es cierto que subiendo el tiraje pueda bajar el precio (o subir las ganancias) porque los gastos fijos se “repartan más”. Enseña un cálculo, bastante difícil en su desarrollo pero fácil de aplicar mecánicamente, para determinar el tiraje “ideal” de un libro, que evite los gastos posteriores por almacenamiento de no vendidos (e invendibles); gastos que no figuran en la contabilidad y por eso se disimulan..., pero sí que existen.
Un placer para bibliófilos la lectura de este libro, a pesar de la segunda parte.

Croatto

"Sentido deceso de biblista Severino Croatto"

"Lean, che" (Lamborghini).

29.4.04

"En cuanto a la envidia, sabemos que no se trata de una apetencia del objeto del otro, sino de lo insoportable de una imagen de completud formada por el otro y su objeto, para la mirada envidiosa y por la mirada envidiosa. No es seguro que a cada uno le guste lo que tiene el otro, pero sí que es difícil soportar el hecho de que alguien tenga lo que quiere" (Germán García, "El sacrificio, la envidia y la 'intratabilidad' de Lacan. Sobre dinero, mujeres y análisis", Página/12, 31/7/03).

Un hombre se está muriendo y le preguntan de qué está orgulloso. “De haber leído Los demonios, de Dostoievsky”, contesta.

En Europa-Europa están pasando Mamma Roma, la segunda película de Pasolini.
Como unos años antes Antonioni en El grito y Fellini en La Strada, Pasolini parece estar preguntándose cómo liquidar los últimos restos del neorrealismo para pasar a otra cosa (como, por otra parte, estaba haciendo Italia).
Precisamente, las dos primeras son películas itinerantes, en las que la cámara se pasea por los restos de un país que hay que hacer de nuevo. En Mamma Roma, la reconstrucción ya está en su apogeo (como el milagro alemán en Sólo quiero que me amen, de Fassbinder), pero los personajes están destinados a no ascender socialmente, pese a la propaganda oficial que se percibe de trasfondo. La cámara los retrata de manera implacable con eternos travellings frontales (y circulares, por otra parte). Una cúpula de iglesia hace de separador, de cesura, entre escenas, y comentario irónico implícito (como la cúpula de San Pedro en Feos, sucios y malos, de Scola).

(Mamma Roma en Pasolini.net.)


Los artículos teóricos de Raymond Chandler parecen escritos por Philip Marlowe puesto en crítico literario.

28.4.04

Hojeando un libro de Laiseca (Por favor, ¡plágienme!), me vino el recuerdo del día (a lo mejor fueron dos días distintos, no importa) que vi a dos escritores en Caballito, con pocas cuadras de diferencia (esto sí): Hugo Midón en una imponente 4x4 y Alberto Laiseca en unos desastrados jeans celestes, en estado deplorable todo él.

"No basta con desear, además hay que tener buenos riñones" (Diderot).

Casting imaginario

Releyendo los Problemas de la poética de Dostoiesvky, recordé algo muy peculiar.
Durante años, luego de haber leído Los demonios, me imaginé a Stavroguin como Oliver Reed, porque creía que Los demonios, de Ken Russell (que sólo vi mucho después), estaba basada en Dostoievsky, y no en Huxley.


"La tradición es, al mismo tiempo que una manera de ver y actuar, una manera de ocultar" (Humberto Maturana y Francisco Varela, El árbol del conocimiento).



"Oigo y olvido, veo y recuerdo, hago y comprendo" (proverbio chino).


Otra idea peregrina: comparar el "ingenuo" y for export discurso sobre el peronismo de El río sin orillas (Saer) con el de Pubis angelical (Puig).



Hay un capítulo de Seinfeld extraordinario: con estructura regresiva, como una obra del trucho Herbert Quain borgesiano que, en la realidad, llevó a cabo el gran Alberto Vanasco (Nueva York Nueva York).
Empezaba por el final y después seguía por un episodio anterior: media hora antes, dos días antes, cinco minutos antes. Sin dejar de ser gracioso, además.

Sacrilegio:
¿No será Sexto sentido una versión oligofrénica y yanqui de Pedro Páramo?



27.4.04

In memoriam

Ayer falleció José Severino Croatto, uno de los más importantes especialistas bíblicos del mundo. Argentino. Autor de infinidad de libros. Vivía humildemente de la enseñanza (en el ISEDET) y por el estudio. Para Croatto, estudiar la Biblia era un (también humilde) camino de liberación para los pueblos oprimidos, sobre todo de América latina. Pude no estar de acuerdo, sin dejar de admirarlo.
Fue un lujo para mí conocerlo.
Cuento una estupidez. Hace un par de años fuimos juntos a la Feria de Frankfurt y, al fotografiarnos frente al stand de la editorial, le dije: "Para mí es como sacarme un foto con Roland Barthes." Él, que había aplicado (magistralmente) análisis barthesianos a los textos bíblicos, se sonrió, un poco avergonzado.
Queda dicho.



“¿No es preferible un sufrimiento uniforme a uno que, por sus altos y bajos, haga confiar en que no es eterno?”
Beckett, El innombrable


TO ALL THOSE WHO LEAD MONOTONOUS LIVES
IN THE HOPE THAT THEY MAY EXPERIENCE AT SECOND HAND
THE DELIGHTS AND DANGERS OF ADVENTURE.

(epígrafe de The Secret Adversary, de Agatha Christie)

Coma peligrosa

Notita en un papel que debo tirar:
“A la memoria de mi hijo, Mario Alberto.”
Tiro la notita.
Es la dedicatoria del libro de un autor anciano.
¿La coma implica que tenía un solo hijo (cosa que, lo sé, no es cierta)?
¿A partir de su muerte (seguramente prematura) se convirtió en el único? ¿Ya lo era antes? ¿O todo lo contrario?
Hay demasiadas cosas en una coma, son peligrosas, más de lo que la gente cree.
Por suerte, ya nadie sabe leer.
Pero habría que hacer algo al respecto...

"Mi cuerpo no tiene las mismas ideas que yo" (Barthes, El placer del texto).
A LA VIRGEN DE GUADALUPE

(en la intervención francesa, pidiendo
por la causa liberal y contra los obispos)


Sangre, terror, desolación, demencia,
invaden, Virgen, el hermoso suelo
donde bella, como iris de consuelo,
sonrió al desventurado tu clemencia.

Sangre humana salpica en tu presencia
del sacrosanto altar el blanco velo;
y hay quien, debiendo mitigar tu duelo,
quiera adunar a Dios con la violencia.

Piedad para tus hijos, ¡Madre amante!
Ampara a nuestra patria, que rendida,
clama paz con acento agonizante;

y Tú, la excelsa, la de luz vestida,
alza, oh Madre de Dios, alza triunfante
la causa de los libres, tan querida.


(Soneto liberal dedicado a la Virgen, en Raymundo Ramos ed., Deíctico de la poesía religiosa mexicana, Buenos Aires-México, Lumen, 2003.)

26.4.04

"Si quien escribe decide guardar silencio sobre un aspecto del mundo, nosotros tenemos derecho de preguntarle: ¿Por qué has hablado de esto y no de lo otro? Puesto que hablas para provocar un cambio, ya que no hay otra manera de hacerlo, ¿por qué quieres cambiar esto en vez de otra cosa?" (Jean Paul Sartre, La responsabilidad del escritor, conferencia en La Sorbona, 1960).


Chiste erudito contado por un amigo (austríaco) en la Feria de Frankfurt.
Un argentino, un inglés, un francés y un alemán tienen que hacer su tesis de doctorado sobre “el elefante”.
El argentino presenta un certificado médico para justificar que no pudo hacerla a tiempo.
El inglés entrega un voluminoso tomo, sobriamente encuadernado en cuero: “El elefante y los viajes de exploración del mundo.”
El francés entrega un tomo menos voluminoso, pero muy elegante, encuadernado en color rosa, con un señalador de seda: “El elefante en la poesía francesa y la noche parisina.”
El alemán entrega seis tomos de seiscientas páginas cada uno, con abundantes notas al pie y una bibliografía que ocupa uno de los tomos completo. Se llama: “Una introducción al estudio del elefante en sí.”

Coincidencia.
Un día, me llamó mi amigo Carlos Battilana al trabajo y me comentó, entre otras cosas, que había hecho la reseña de las obras completas de Héctor Viel Temperley para La Nación. Hablamos, por supuesto, del libro más famoso del poeta que está de moda ahora: Hospital Británico.
Al otro día (si no fue el mismo), fui a CLASA a cobrar unos mangos. Por supuesto, yendo por avenida Caseros, pasé por el Hospital Británico. Pensé en Viel Temperley. Al mismo tiempo, miré un coche estacionado cerca de donde yo estaba pasando. Atrás tenía la marca de la concesionaria: Viel Temperley.


"Para no hablar de esa droga terrible, nosotros mismos, que tomamos en la soledad" (Benjamin).

Un poema de Beckett

I would like my love to die
and the rain to be falling on the graveyard
and on me walking the streets
mourning the first and last to love me


(Me gustaría que mi amada muriera
y que la lluvia cayese sobre la tumba
y sobre mí, caminando por las calles,
de duelo por la primera y la última que me amó)

... y el libro corporal descuadernaron...

(“La crucifixión”, anónimo mexicano, siglo XVII)


Dos textos muy impresionantes sobre el Amazonas, en Radar de ayer.

Color local

En ciertas ciudades de Latinoamérica, los trabajadores "golondrinas", de origen indígena, visten durante el día las ropas "occidentales", y a la noche, cuando se van a dormir, se ponen sus ropas tradicionales.
Es sabido también que los indígenas hacen artesanías para turistas, con diseños inventados ad hoc, sin ningún significado para ellos. En cambio, en los utensilios para uso propio, sí usan los verdaderos diseños tradicionales.
(Debo ambas historias a Carlos Núñez Hurtado, educador mexicano, autor de Más sabe el pueblo...)

25.4.04

Arte superior y arte inferior

Si los “marcianos” invadieran la Tierra, ¿reconocerían sin más la superioridad del arte europeo, u “occidental”, sobre cualquier otro? ¿O más bien se apresurarían a poner todo el arte “terrícola” en la misma bolsa, como irremediablemente inferior? Por supuesto, los intelectuales “terrícolas” educados en o por Marte estarían de acuerdo con esta valoración.

Experimento

Un autor de la editorial en la que trabajo, exministro de Ecuador, ahora exiliado en México, tiene un amigo, economista del FMI. Este amigo le confesó que el organismo de crédito toleró la dolarización ecuatoriana como experimento. "Es un país chico, con pocos habitantes, de poco desarrollo económico --le dijo--. Nos sirve para ver qué pasa, casi como en un laboratorio. Los daños no pueden ser muchos."
El autor, también economista, estaba ligeramente escandalizado cuando me contaba esto. Él había previsto que, por la vecindad de Ecuador con Colombia, una economía dolarizada iba a dar el cauce ideal para los narcodólares. Uno de los resultados: inflación... en dólares.
En el FMI deben estar contentos, por todos los datos que estarán recogiendo para futuros experimentos.



24.4.04

Carlos Octavio Bunge, La novela de la sangre (novela histórica argentina) (1903), bajada de El Aleph.

Novela naturalista-positivista situada en la época de Rosas.
Regis y Blanca se casan pero, en la noche de bodas, el primero (sospechado de dar malas ideas “logísticas” a la juventud de entonces) es llevado por orden de Rosas y enviado a Estanislao López, quien lo encierra en la misma celda que a Paz. Blanca y sus familiares lo esperan en vano, más de diez años. Mientras, un amigo de la infancia, Pantuci, soldado federal, le arrastra el ala a la marmórea Blanca y finalmente se casa con ella, que ya está enloquecida por el sufrimiento. Al final, Regis escapa y se reencuentra con su amada (en Uruguay), que tiene un hijo de Pantuci. Esa misma noche el chico se ahoga en un charco, pero los amantes frustrados se quedan juntos para siempre.
Lo notable de esta novela familiar-racial (que en general, salvando algunos párrafos casuales, es muy mala) es su insistencia en el diagnóstico “cientificista”, con su correspondiente vocablo epocal: Rosas es un “neurótico” grave, todos los personajes (especialmente los buenos, los “románticos”) tienen problemas en los “nervios”, Blanca es “histérica”. Las descripciones son crudas, sobre todo en lo que respecta a la sangre y la violencia (no tanto en el sexo, que está sugerido).
Hay más sadismo en el narrador que en los personajes federales...
Pero Rosas es presentado como la cumbre de la perversidad y la astucia. Ni Mármol fue tan lejos.
El malo Pantuci se redime al final, pero provisoriamente, con desconfianza de parte del narrador.
(La base teórica, racista, de todo esto, está en otro libro del autor, Nuestra América.)

Clases

En uno de sus últimos discursos públicos, Pierre Bourdieu comentó que el pensamiento único, el neoliberalismo, había intentado --con bastante éxito-- imponer el concepto, absolutamente contrario a todo sentido común y a toda realidad, de que "el capital crea trabajo" (cuando lo cierto es exactamente al revés).
Ahora parece extrañamente exitosa la intentona de convencernos, una vez más, de que no hay clases sociales. Vuelven las viejas consignas de "todos estamos en el mismo barco", "la inseguridad nos afecta a todos por igual", "somos todos argentinos", "la seguridad no es de izquierda o de derecha".
Habrá que decir, por enésima vez, no. Pero precisamente cómo.





Tesis de graduación

Hace un tiempo, un grupo de alumnos de una prestigiosa "escuela de periodismo" tuvo que presentar un trabajo de graduación. Eligieron hacer una biografía del difunto Alberto Olmedo. Para ello, se contactaron con la familia del actor, que aseguró toda su colaboración (datos desconocidos, fotos inéditas, etc.)... a cambio de que no se tocaran dos temas: "la droga" y Nancy Herrera, última pareja de Olmedo. El grupo de alumnos --quiero creer que luego de intensos y esclarecedores debates-- aceptó los condicionamientos, redactó la biografía (profusamente ilustrada) y completó sus estudios.


Efecto de realidad

coming home
* * *

"No te ortivés, Nelly, nosotros somos el magma del barrio", dice un personaje de la tira La Nelly.

(Entre paréntesis, si alguien tiene contacto con uno de sus autores, el célebre "Colorado" Rubén Mira, mándele saludos de Pablo Valle. Gracias.)

23.4.04

Negros, no (II)

El tema de conversación obligado fue la presencia de los piqueteros, que recibieron algunos aplausos a su llegada. Pero hubo comentarios menos amigables: "Si se quedan atrás y no molestan, está todo bien". También se escucharon voces de repudio. "Al final vinieron esos desgraciados", le comentó una mujer a su amiga.
(...)
"Estamos acá para pedir justicia para todos. No hay izquierda, no hay derecha. Tenemos que luchar todos juntos porque no hay otra forma de salir adelante", dijo Blumberg después de las oraciones.
(...)
Cuando Blumberg regresó, repitió con ojos vidriosos que "esto es lo que le prometí a Axel" y despidió a la multitud con una recomendación: "Vaya cada uno a su casa, a ningún otro lado". Pareció un mensaje para los piqueteros, que entonces ya estaban marchando rumbo a Plaza de Mayo.

Clarín, 23/4/04
* * *

"Que me juzgue dios o Diego" (Carlos Ferro Viera, "Ferrito"; minúsculas y mayúsculas, del videograph).

22.4.04

Tinelli en Babilonia

Ya que parece que vuelve el Hombre, aprovecho para postear un viejo texto publicado por moi en la injustamente olvidada revista La vereda de enfrente.

"Como todos los hombres de Babilonia, he sido procónsul; como todos, esclavo; también he conocido la omnipotencia, el oprobio, las cárceles. Durante un año de la luna, he sido declarado invisible: gritaba y no me respondían, robaba el pan y no me decapitaban; traficaba toneladas de drogas y nadie me perseguía; fumaba una pipa sagrada y era condenado, de pronto, a cadena perpetua. He conocido lo que ignoran otros: la incertidumbre.
Debo esa variedad casi atroz a una institución que otras repúblicas ignoran o que obra en ellas de modo imperfecto y secreto: Tinelli."

Completo.

21.4.04

Informe sobre prostitución infantil en Punto.doc.

¿Para cuándo las marchas respectivas?

Se me acaba de ocurrir un paralelismo: bajar edad para la imputabilidad de los delitos a 14 años/prostituir chicos y chicas de 14 años.
¿No es coherente?

* * *

¿Y si Se muere?

Habermas y El discurso filosófico de la modernidad

- Jürgen Habermas, El discurso filosófico de la modernidad (Doce lecciones),trad. de Manuel Jiménez Redondo, Madrid, Taurus, 1989, 464 pp. (Ed. orig: Der Philosophische Diskurs der Moderne, Frankfurt am Main, Suhrkamp Verlag, 1985.)

(Por fin pude leer este ladrillo que, prestado, vegetaba en mi biblioteca, emitiendo llamados lastimeros hacia mi conciencia culpable. Valió la pena.)
“Aproveché” que no podía subrayarlo, según mi antipática costumbre, y resolví leerlo como si fuera una novela ligera, de vacaciones. Sería la novela de la modernidad, claro, o del discurso filosófico de la modernidad. O, mejor todavía, la novela del combate Habermas vs. posestructuralistas (y precursores).
Antes de pasar a mayores, es bueno transcribir el índice, que da cabal cuenta del contenido de estas “Doce lecciones”.
1. La modernidad: su conciencia del tiempo y su necesidad de autocercioramiento.
Excurso sobre las tesis de Filosofía de la Historia de Benjamin.
2. Hegel: Concepto de modernidad.
Excurso sobre las cartas de Schiller acerca de la educación estética del hombre.
3. Tres perspectivas: Hegelianos de izquierda, hegelianos de derecha y Nietzsche.
La prosecución del proyecto de Hegel en términos de filosofía de la praxis.
La respuesta neoconservadora a la filosofía de la praxis.
Excurso sobre el envejecimiento del paradigma de la producción.
4. Entrada en la posmodernidad: Nietzsche como plataforma giratoria.
5. Horkheimer y Adorno: el entrelazamiento de mito e Ilustración.
6. Heidegger: Socavación del racionalismo occidental en términos de crítica a la metafísica.
7. Sobrepujamiento de la filosofía primera temporalizada: crítica de Derrida al fonocentrismo.
Excurso sobre la disolución de la diferencia de géneros entre Filosofía y Literatura.
8. Entre erotismo y economía general: Bataille.
9. Foucault: Desenmascaramiento de las ciencias humanas en términos de crítica a la razón.
10. Aporías a la teoría del poder.
11. Otra manera de salir de la filosofía del sujeto: razón comunicativa vs. razón centrada en el sujeto.
Excurso sobre C. Castoriadis: “La institución imaginaria”.
12. El contenido normativo de la modernidad.
Excurso sobre Niklas Luhmann: apropiación de la herencia de la filosofía del sujeto en términos de teoría de sistemas.
En efecto, probablemente haberlo leído de esta manera, sin subrayar y sin tomar notas, me dejó con la previsible sensación de saber de este libro poco más de lo que me había adelantado el amigo que me lo prestó: que H. les da con todo a todos los popes del “posestructuralismo” (que él llama “neoestructuralismo”): Foucault y Derrida, sobre todo. Y sus precursores: Nietzsche y Heidegger.
El tema central del libro tiene que ver con la modernidad, la posmodernidad y su “asalto a la razón”. Una especie de contexto para la tesis habermasiana (archifamosa) de la “modernidad como proyecto inacabado”, título de un discurso de 1980.
Hegel aparece como el primer filósofo de la modernidad, que, a su vez, empieza a pensar en sus límites (en realidad, Descartes y Kant serían los filósofos de la modernidad plena). Hay coincidencia con el romanticismo, por supuesto, pero H. distingue dos Hegel: el primero, aún romántico, parece confiar todavía en una especie de “razón comunicativa” (lo que le interesa a H.). El segundo, y más famoso, se da vuelta y concluye célebremente con que “todo lo real es racional”, lo cual es una especie de doble negación, tanto de lo real como, especialmente, de lo racional.
Es el principio de la “razón instrumental”, la razón orientada a fines, que dominará Occidente desde entonces y se transformará en el paradigma (erróneo) de la Razón en sí. (Recordar que para Kant había más “razones”.)
Los críticos acérrimos de la razón, entonces, incluyendo a aquellos que H. considera más cercanos, como Adorno, se dirigirán contra esa Razón todopoderosa que llevó, famosamente, a Auschwitz.
Pero aquí viene algo central para H.: la cuestión de la aporética. Porque, dicho muy rápidamente, se va a criticar a la razón desde la razón. (A la modernidad desde la modernidad, etc.) Claro que cada pensador (FN, Heidegger, Bataille, Foucault, Derrida, etc.) tratará de superar esta paradoja a su manera y por sus caminos. Según H., sin éxito.
¿Cómo “denunciar” lo racional sin ninguna apelación a lo veritativo, aunque sea solapado? Y lo normativo, incluso, se filtra en el estilo (muy aguda observación respecto de MF).
Otro problema: es cierto que la filosofía del sujeto debe darse por definitivamente muerta, pero ¿con qué se la reemplaza? No es tan fácil como parece. Ni la ausencia absoluta de sujeto, de autor, etc. (que lleva a otras aporías), ni una ambigua “transubjetividad” sirven.


Negros, no

En Clarín de hoy:
"La participación de militantes piqueteros en la marcha convocada para mañana por Juan Carlos Blumberg, padre de Axel, el chico secuestrado y asesinado recientemente, está generando una fuerte polémica con otros sectores que adhieren a la protesta. Tal es así que el propio empresario se vio obligado a pedir esta mañana que la gente “concurra y no tenga miedo”.
Blumberg, en diálogo con radio Continental, reconoció esta mañana que hay rechazo por parte de algunos sectores a la presencia de los piqueteros: “La mayoría de la ciudadanía que llama a casa quiere que ellos (los piqueteros) no vengan”.
"Que la gente no tenga miedo y que concurra, pero no minorías que quieren entorpecer esta marcha: sólo aceptamos ciudadanos con velas, sin pancartas políticas, sin agrupación gremial ni nada por el estilo", puntualizó.
(...)
Blumberg advirtió, sin embargo, que si Raúl Castells y sus piqueteros del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD) quieren participar, lo hagan "con velas, sin consignas, y sin el propósito de continuar la marcha hacia otro lado, entonces que vengan; si no, no".
(...)
En materia de Seguridad, los piqueteros reclaman: "juicio y castigo a los asesinos, desmantelamiento del aparato represivo, disolución de la Bonaerense y elección directa de los jueces"."

Nota completa.

20.4.04

¿De qué se ríe Noam?

Bush, go home
* * *

¿Y si se muere el Diego?

* * *

Frances Stonor Saunders, La CIA y la guerra fría cultural, trad. de Rafael Fontes, Madrid, Debate, 2001.

Una extensa y rigurosa investigación histórica, que se puede leer como una novela.
El tema es cómo la CIA utilizó a numerosos intelectuales progresistas, de la “izquierda no comunista”, para librar la guerra fría “cultural” contra la Unión Soviética. Millones de dólares en congresos, festivales, becas, revistas culturales, premios, etc.
Una de las intrigas es hasta qué punto esos intelectuales “sabían” o “no sabían” que estaban siendo utilizados por la CIA o, al menos, el gobierno yanqui. Si eran ingenuos o hipócritas.
Por supuesto, uno de los elementos más destacados tiene que ver con los “personajes” involucrados, verdaderamente “de novela”. Dos, sobre todo: Michael Josselson, el factótum, y Nicolás Nabokov, el dandy. Hay otros; Melvin Lasky, Stephen Spender, Dwight MacDonald, Tom Braden, Sidney Hook, Diana Josselson, el senador McCarthy, etc.
Finalmente, lo más profundo de todo (y, por eso mismo, lo abordado menos satisfactoriamente, aunque tenga su desarrollo, y esto sea un mérito en sí mismo) es la cuestión de hasta qué punto estas “condiciones materiales” (el apoyo económico directo e indirecto de la CIA) influyeron sobre el desarrollo del arte “moderno”. De hecho, las partes sobre el “expresionismo abstracto” (Pollock) son acojonantes. La autora tiene un libro anterior que se llama Hidden Hands: A Different Story of Modernism, que cita poco pero parece estar referido a estas cuestiones precisamente. ¿No se concibe el arte moderno sin estos apoyos “espurios”?
¿El arte está “más allá” de su sustento económico? La pregunta parece vieja y raída, aparte de estar mal formulada. Además, hay artes y artes; quizás un escritor puede hacer lo mismo casi sin apoyo; por lo menos, su arte depende casi exclusivamente de él. Un pintor, un músico, bastante menos. Un cineasta, ni hablar (el capítulo sobre Hollywood también es interesante, pero más previsible, quizás: el carácter propagandístico del cine yanqui siempre fue mucho menos sutil y, por eso, menos oculto; también se lo estudió más, sobre todo en relación con la paradoja de las listas negras del macartismo, después de que Hollywood se consagró a ensalzar a la URSS como aliado ocasional durante la Segunda Guerra).
Pero el tema de la ideología detrás del expresionismo abstracto sigue siendo más que inquietante. El “arte abstracto” como opuesto al “realismo socialista” es obvio, pero ¡como representativo de una “sociedad libre y democrática”! Lo más paradójico es que los políticos más tradicionales (por ejemplo, el presidente Truman) odiaban tanto este arte como Stalin o Kruschev. Así que la apuesta “estética” de la CIA (Stonor cita una tesis no publicada que se llama precisamente “La estética de la CIA” y debe ser interesantísima) fue muy audaz y no podía durar.
Hay mucho más para ver.
Por ejemplo, el papel de Orwell y las adaptaciones tendenciosas que se hicieron de 1984 y Rebelión en la granja.
Es lamentable que haya muy poco sobre América latina, salvo el ridículo episodio de Robert Lowell enviado a Buenos Aires como embajador cultural, y que termina borracho e internado en un manicomio después de un brote. Parece que la CIA daba por perdida la región, por su intenso antiamericanismo. En realidad, lo que no podía ser acá era utilizar a los “izquierdistas no comunistas”, pero habría que verlo. Para esto, hay que leer como imprescindible complemento el libro de Claudia Gilman, Entre la pluma y el fusil.

Una reseña en inglés.
Otra en español (al autor le preocupa lo mismo que a mí, cómo influyó la CIA en su país, en este caso España).

18.4.04

Apareció Neustadt, ¡qué bueno!
Una vez, en uno de sus programas de la década del setenta, dijo, dramáticamente: "Estoy condenado a muerte, sé que hay una bala con mi nombre." Y una invitada, dirigente de la juventud peronista, le contestó: "No crea, Neustadt, las balas son demasiado caras."
Se ve que los Montoneros tenían un problema de, como se diría ahora, "asignación de recursos". Hay inversiones que justifican el costo.

15.4.04

¿Me equivoco mucho o Morales Solá está buchoneando "montoneros" con la excusa de defenderlos?
Ver nota en La Nación.

14.4.04

Invitación

E-mails del Cielo
Se presenta en la Feria del Libro el domingo 2 de mayo a las 20.30, en la sala Domingo F. Sarmiento.
Se referirán a la obra Julia Bowland, Henny Trayles, Alcira Mariam Alizade y la autora (my wife).


13.4.04

Un día estaba en Ciudad Universitaria, entre una clase y otra, leyendo Concierto barroco, de Carpentier. Se acercó a saludarme un compañero y mostró sorpresa ante mi lectura. "Hay que leer de todo", le dije, como disculpándome. "Sí, menos a Rodrigo Fresán", me contestó.

Se me descuajeringó el blog otra vez.
¿Qué habrá pasado?

"Son asombrosas las piruetas dialécticas de los cuatro o cinco pensadores que a lo largo de las últimas décadas han acompañado con sus juicios y metáforas los mayores desastres y las aberraciones más intolerables de la política argentina. Son asombrosas porque disfrazan la desnudez visible de los hechos: la causa Blumberg no hace otra cosa, día por día, que hablar de la forma que adquirió el terrorismo de Estado en democracia.
¿Qué otra cosa es, si no, esta peste policial implicada en cada caso de secuestro, atentado, negocio sucio, desarmaderos, narcotráfico? ¿Qué ruta tiene el delito, si no es la que lleva del chorro al policía y del policía al puntero y del puntero al intendente y viceversa?" (Sandra Russo en Página/12 de hoy).
Nota completa.

12.4.04

No vi Monster y, casi seguramente, no la veré, pero se me ocurren dos preguntas:
1. ¿Por qué dejarle el título en inglés?
2. ¿Era necesario elegir a una actriz "linda" y afearla con un maquillaje inverosímil?

4.4.04

Me gusta la vida tranquila, pero no me tocó (Keith Richards).

Seguridad

"Uno de cada cuatro chicos trabaja para poder comer. Es una de las llagas que dejó la crisis. El Gobierno acaba de lanzar una campaña para alentar la erradicación del empleo infantil. Pero faltan herramientas para lograrlo. No hay una ley específica sobre el tema ni estadísticas actualizadas. Pedirán a los pibes cartoneros que no abandonen la escuela" (Clarín de hoy; la bastardilla es mía).
Nota completa.

Las clases no existen, mi amor

"Estas medidas tendrían que estar vigentes hace rato, las vengo reclamando hace 20 meses, pero recién se presta atención ahora cuando las reclama alguien de buena posición" (Emilce de Peralta, madre de Diego, asesinado en Ezpeleta tras 17 días de secuestro; Clarín de hoy, pág. 9; la bastardilla es mía).

2.4.04

"... el tradicional comercio de infelicidad entre los seres humanos" (Money-Kyrle).
La Nación llama a la marcha de ayer "la más impresionante manifestación popular en muchos años".
Claro, para "el diario de los Mitre" no hubo nunca cacerolazos contra De la Rúa ni piquetes masivos (o no fueron "impresionantes", o no fueron una "manifestación popular").
Cada vez se hace más utópica la exhortación de Benjamin a crear conceptos que no puedan ser recuperados por el fascismo.



1.4.04

Aliverti sobre Kirchner, hoy en Página/12.
"Tipo extraño este Kirchner. Aun en la peor de las hipótesis, consistente en suponer que en 'la política' juega así de fuerte hacia la izquierda porque se trata de amortiguar un rumbo de derecha en 'la economía', lo que hizo y lo que pasó el miércoles fue impresionante.
(...)
¿Kirchner es o será un claudicante frente al poder económico? Sí, o entre sí y muy probablemente. ¿Pero el miércoles pasado no se podía creerlo que estábamos viendo y dieron ganas de decirle 'gracias', más allá de las dudas enormes sobre su futuro? Sí, también. No es contradictorio. Es dialéctica. Que no es otra cosa que la resolución de las contradicciones."
Nota completa.