10.10.05

Realismo

Ayer vi (empezada, como siempre) la película japonesa Audición, de Takashi Miike. Como tiene algunas escenas de gran crueldad y sadismo, me impulsó a escribir algo que me debo desde hace rato.
Difícilmente me impresionan estas cosas; ni el ejemplar más repulsivo del cine gore me da más que un poquitito apenas de asco (pienso en alguna de las primeras películas de Peter Jackson) o un sobresalto si está diseñado con golpes bajos (¡ah, querido Hitch, qué pocos han sabido aprender la diferencia, estética e ideológica, entre “suspenso” y “sorpresa”!). En cambio, me basta ver algún noticiero o, mejor, un reality del tipo E24 o Policías en acción (con todo lo truchos que son a veces) para prácticamente descomponerme sin necesidad de ver mucha sangre. Me desmorono ante la mera realidad si sé, o creo, que se trata de eso. Lo otro (la “ficción”) es solamente cartón pintado, telgopor, jugo de tomate, y una parte de mí siempre está consciente de ello aunque trate de abandonarme al flujo del relato y éste esté muy bien llevado. ¿Deformación profesional, prejuicio “realista”? Supongo que un poco de ambas cosas, y alguna otra más.
Sin embargo, me retracto en parte. Hay un tipo que logra impresionarme: Cronenberg. No puedo entrar en detalles pero me parece que algunas de sus fobias u obsesiones (sobre todo, la obstétrica) entran en sintonía con algunas de las mías, y esto hace que hasta sus películas más "fallidas" me parezcan obras maestras.
Bueno, lo dejo acá hasta que pueda aclararlo (aclarármelo) mejor.

2 comentarios:

  1. es extraño. Cronenberg ejerce para mí (que tengo tolerancia cero a lo violento: verdadero,cierto o verosímil) una suerte de atracción hacia lo siniestro, y me hace asustar de mí misma un poco. Yo que tuve partos deliciosos porque no tolero que me duela nada!!

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  2. Coincidimos, parece. Y qué suerte lo de los partos.

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