Barcelona: pobrecitos, hace cientos de revistas que se dedican a escribir con la peor leche, odiando todo el tiempo: racistas, prejuiciosos, de lo peor.
Merecen la condena y el repudio público de toda persona que se dedique a construir, a multiplicar.
Barcelona es la versión 2000 de lo que fue la barra de la esquina del alfonsinismo en los ochentas (la noticia rebelde, castelo) y los 4cabezas de los noventas. Qué esperaban? NO he leído la nota de adentro, pero lo más probable es que se refieran a Blumberg, a la inseguridad..., es decir, a la agenda progre de ponerse comprensivo con la mafia organizada de la policía de la provincia junto con el lumpenazgo del conurbano que salen a molestarnos no solo a nosotros, sino lo que es peor, a los que nosotros más queremos. Seguir sosteniendo esa estupidez de que la causa de los delitos de la provincia está en la pobreza, además de miope, tonto, cómodo es de una imbecilidad mayúscula.
A veces me parece que a Barcelona no la escriben esos muchachos, sino los comentarios anónimos de los blogs. Se escribe sola, digamos. ¿Ya hay un analfabetismo de la ironía? Parece que sí. No me canso de citarlo: "Lean, che" (Lamborghini).
Sí, Pablo. La clase media es fascista. Fascista, cacerolera y ahorrista. Deme dos y a estos negros hay que cagarlos a tiros. Con los milicos estábamos mejor. Esa es la clase mierda, digo, media.
Cuando se habla mal de la clase media me pregunto, ¿qué es lo que no es clase media, los very few que quedarían fuera de sus pe´simas características? En algunos casos, hablar mal de la clase media califica más al que enuncia que a la clase media en sí. Por otro lado fascista no es una palabra muy precisa, demasiado precisa para aplicar; me suena tan vaga como la palabra "facho" tal como la usa un militante de izquierda a la violeta. Por otro lado ese tema de la corrección como reprobable, y la incorrección como condición loable en una persona. Me hace acordar a la palabra transgresión, que hasta Moria Casán usaba en forma elogiosa; yo soy una mujer transgresora. Bueno Yiya Murano, también, no? La transgresión por sí sola no implica nada; la corrección no es mala en sí. Barcelona, por otro lado, me resulta un asco.
¿Barcelona siempre fue políticamente correcto o ahora se nota más?
ResponderBorrarBarcelona: pobrecitos, hace cientos de revistas que se dedican a escribir con la peor leche, odiando todo el tiempo: racistas, prejuiciosos, de lo peor.
ResponderBorrarMerecen la condena y el repudio público de toda persona que se dedique a construir, a multiplicar.
Barcelona es la versión 2000 de lo que fue la barra de la esquina del alfonsinismo en los ochentas (la noticia rebelde, castelo) y los 4cabezas de los noventas. Qué esperaban? NO he leído la nota de adentro, pero lo más probable es que se refieran a Blumberg, a la inseguridad..., es decir, a la agenda progre de ponerse comprensivo con la mafia organizada de la policía de la provincia junto con el lumpenazgo del conurbano que salen a molestarnos no solo a nosotros, sino lo que es peor, a los que nosotros más queremos. Seguir sosteniendo esa estupidez de que la causa de los delitos de la provincia está en la pobreza, además de miope, tonto, cómodo es de una imbecilidad mayúscula.
ResponderBorrarPerdón, se me escapó algo. ¿La clase media no es fascista? Todos los días se aprende algo, gracias.
ResponderBorrarA veces me parece que a Barcelona no la escriben esos muchachos, sino los comentarios anónimos de los blogs. Se escribe sola, digamos. ¿Ya hay un analfabetismo de la ironía? Parece que sí. No me canso de citarlo: "Lean, che" (Lamborghini).
ResponderBorrarSí, Pablo. La clase media es fascista. Fascista, cacerolera y ahorrista. Deme dos y a estos negros hay que cagarlos a tiros. Con los milicos estábamos mejor.
ResponderBorrarEsa es la clase mierda, digo, media.
Cuando se habla mal de la clase media me pregunto, ¿qué es lo que no es clase media, los very few que quedarían fuera de sus pe´simas características? En algunos casos, hablar mal de la clase media califica más al que enuncia que a la clase media en sí. Por otro lado fascista no es una palabra muy precisa, demasiado precisa para aplicar; me suena tan vaga como la palabra "facho" tal como la usa un militante de izquierda a la violeta. Por otro lado ese tema de la corrección como reprobable, y la incorrección como condición loable en una persona. Me hace acordar a la palabra transgresión, que hasta Moria Casán usaba en forma elogiosa; yo soy una mujer transgresora. Bueno Yiya Murano, también, no? La transgresión por sí sola no implica nada; la corrección no es mala en sí. Barcelona, por otro lado, me resulta un asco.
ResponderBorrarLa clase media, esa que se asusta y se vuelve fascista o, mejor, hace mostración del fascismo que le es rasgo distintivo, claro que sí.
ResponderBorrar¿Barcelona da asco? ¿Por qué? ¿Me perdí algo asqueroso? Lástima...
La palabra fascista es vaga para vagas elucubraciones y bien contundente para los que saben de qué se trata.
Salud y saludos