19.9.04

Golden boy

La designación de Martín Redrado, ex golden boy de Menem-Cavallo, como presidente del Banco Central, parece sugerir que el haber sido menemista es un pecado que no todos deben purgar de la misma manera.
A lo mejor, el Gobierno cree que siempre se puede contar con un tecnócrata que alquile sus servicios al mejor postor. Pero que se cuide, porque eso es lo que pasa con los guardaespaldas: siempre puede aparecer alguien que les pague mejor.


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