Parece que la solución para los "esclavos bolivianos" es que pasen a ser vendedores callejeros de verdurita, que, como se sabe, gozan de todos los derechos civiles, laborales, etc.
Después de todo, ése era precisamente el ideal de la injustamente olvidada estadista Adelina "socialismo las pelotas" de Viola: una sociedad en la que este tipo de afortunados cuentapropistas podían llegar a vender más barato que un supermercado... ¡Libre competencia, vamos!
No hay comentarios.:
Publicar un comentario